¿Qué cazo comprar? Consejos y recomendaciones para 2018

El cazo imprescindible

El cazo es un elemento indispensable en toda batería de cocina, suele ser redondo, con bordes altos y un mango largo, es fácil de conservar gracias a su revestimiento antiadhesivo. Es ideal para cocer arroz, calentar un vaso de leche, preparar una salsa o incluso llevar a ebullición el agua para la pasta. Puede tener distintas capacidades y medidas y diferentes materiales (hierro, aluminio, acero, cerámica…).

¿Qué material elijo para la vitrocerámica de inducción?

Para que un cazo funcione en una vitrocerámica de inducción, debe contener un metal magnético. Los modelos compatibles con la inducción suelen ser de hierro, inoxidable o colado. El cobre o el aluminio no son adecuados. Los cazos compatibles con la inducción se caracterizan por tener un fondo bastante espeso, resistente a las diferencias de temperatura y aptos para tener superficies antideslizantes. Otro material que está empezando a tener mucho peso es la cerámica.

Algunos cazos disponen de mangos desmontables. Son muy prácticos para terminar de hacer un plato en el horno y además caben fácilmente en el lavavajillas y en tus armarios de la cocina. En cuanto al ahorro de espacio, también existen modelos con mango plegable para que puedas guardarlos fácilmente.

Un lote de cazos para una batería completa

¿Estás comprando tu primera batería de cocina? ¿Quieres cambiar la antigua? Elige los modelos que se venden en set: además de ser más flexibles a la hora de usarlos, suponen una solución para ahorrar y tener todos los accesorios a juego.