Horno eléctrico. Consejos a tener en cuenta al comprar

Un horno eléctrico es un electrodoméstico que genera calor a altas temperaturas (hasta 200 grados en funcionamiento y unos 500 grados centígrados durante su limpieza por pirólisis -si es un horno pirolítico-) y lo conserva en un compartimento cerrado, que se usa para cocinar, calentar o secar alimentos, gracias al calor generado por medio de la electricidad.

Hoy en día hay varios tipos de hornos eléctricos en venta en el mercado, pero antes de comprar uno te aconsejamos que tengas en cuenta estos aspectos para elegir bien:

•  La capacidad de la cavidad interior y las dimensiones del horno: la capacidad de los hornos estándar que se venden en el mercado suele oscilar entre los 50 y los 60 litros y sus dimensiones vienen especificadas en la ficha técnica, para que no haya problemas a la hora de instalarlos (o encastrarlos en nuestra cocina).
• Para los que necesiten medidas especiales, hay hornos portátiles con grill, que suelen medir unos 20 cm de alto por 40 cm de ancho y que al ser portátiles no van encastrados, es decir, que se pueden colocar en nuestra cocina donde más convenga.
• Y si necesitamos medidas especiales porque nuestra cocina es mini (como nuestro piso), también los fabricantes han ideado combinaciones de horno con lavavajillas (dúos) o, más difícil todavía, horno, vitrocerámica y lavavajillas todo en uno (tríos).
•  El consumo energético (Clase energética): al ser un electrodoméstico eléctrico que requiere mucha potencia para calentar los alimentos, el mejor horno será sin duda el que menor consumo eléctrico suponga al usarlo, es decir, el que tenga mejor eficiencia energética (uno con una etiqueta energética con la letra A de color verde).
• Además, la eficiencia energética es uno de los criterios que tienen las Comunidades Autónomas a la hora de conceder ayudas para la sustitución de electrodomésticos por unos nuevos más eficientes en sus planes renove periódicos.
•  Las funciones que tiene (hornos eléctricos multifunción): se acabó la época en la que el horno eléctrico convencional calentaba la comida y ya está. Los hornos actuales más vendidos suelen ser multifunción, es decir, que pueden ser usados para cocinar de variadas formas.

Las principales funciones que cumplen los hornos multifunción son, entre otras:

• Calor superior e inferior: este tipo de calor es indicado para preparar pan, galletas, pastas y asados de ternera, vaca o caza.
• Calor inferior: dorado de galletas, arroz al horno, empanadas o cocina al baño maría.
• Calor superior e inferior con aire caliente: Cocción simultánea a varios niveles. Pueden cocinarse al mismo tiempo varios platos sin que se mezclen sabores ni olores.
• Grill de amplia superficie: el grill es muy práctico para gratinar alimentos.
• Grill con aire caliente: esta función es muy útil a la hora de asar al grill piezas grandes de carne que quedan sabrosas y crujientes.

La seguridad (puertas frías, carro extraíble y cierre de seguridad): el horno alcanza temperaturas altísimas (unos 200 grados en funcionamiento) y por tanto es una fuente potencial de muchas emergencias caseras por quemaduras. Para evitar estos males, los fabricantes de hornos cada vez toman mejores medidas como las puertas con varios cristales superpuestos (hay hornos de hasta cuatro cristales), también llamadas «puertas frías».

Las puertas frías, además de contribuir a un mejor aislamiento interior de la temperatura, son capaces de garantizar en la parte exterior cara al usuario, unos 30 grados (ojo, en los hornos pirolíticos, durante la limpieza por pirólisis, se pueden alcanzar hasta 60 grados en la puerta por su parte exterior).

Además como medida adicional de seguridad podríamos destacar el carro extraíble, es decir, una vez que abres la puerta del horno, en vez de tener que meter tus manos dentro, donde hay altísimas temperaturas, puedes extraer la puerta junto con la bandeja de tu asado hacia fuera y echar una visual, añadir líquidos, trinchar, en fin, comprobar cómo van los preparativos. (También es cierto que fabricantes como Fagor disponen de puertas convencionales que al abrirse desplazan la bandeja hacia afuera sin necesidad de tocarla -la bandeja está «enganchada» a la puerta por su cristal interior-).

Horno con carro extraíble Bosch

Otra medida de seguridad puede ser el bloqueo de seguridad anti-niños que algunos modelos tienen. Este bloqueo suele estar presente también en los hornos con limpieza pirolítica durante el autolimpiado por pirólisis.

La limpieza (¿horno pirolítico o catalítico?): hasta hace poco, esta era una de las facetas más ingratas de cocinar con un horno eléctrico, su limpieza. Había que recurrir a desengrasantes y frotar, limpiar el horno por dentro, llimpiar las bandejas y parrillas, un incordio.

Desde hace unos años, existen los hornos pirolíticos, que recurren al propio calor que el horno generado para autolimpiarse, eliminando todo tipo de restos de lo cocinado (aceites, grasas, azúcares, etc.) mediante pirólisis que podría traducirse como «destruir mediante calor».

Mediante altas temperaturas (unos 500 grados) el horno pulveriza (carboniza) los restos de comida que hayan quedado en las paredes y bandejas. Una vez terminada esta función y bajada la temperatura del horno (antes lo normal es que no te deje abrir la puerta), basta con pasar un trapo húmedo o un cepillito para retirar con toda facilidad la fina capa de cenizas generadas tras la limpieza.-Algunos modelos de horno pirolíticos incoporan la función «pirocontrol» que les permite adaptar la duración de la pirólisis en función del grado de suciedad del horno.En cualquier caso, te recomendamos hacer una limpieza pirolítica justo después de haber usado el horno, ya que, estando ya caliente, podrá alcanzar antes y con menos coste energético los 500 grados necesarios para la pirólisis.

Por su parte, los hornos catalíticos eliminan los restos de grasas del horno (ojo, no eliminan los azúcares) mediante oxidación una vez superada la temperatura de 200 grados y, a diferencia de los hornos pirolíticos, su limpieza se hace sobre la marcha, durante su uso (y a menor temperatura, es decir, con menos coste). Si la suciedad se resiste, un buen consejo es dejar el horno encendido entre diez y quince minutos tras acabar de cocinar y haber sacado el asado del horno.

La comodidad en el uso (detalles prácticos): estos detalles son los que, en igualdad de modelos, harán que te decantes por un modelo de horno u otro. Entre los principales detalles nos gustaría destacar:

• El tipo de puerta. Hay hornos con apertura convencional (sobre un gozne horizontal en la parte inferior), con carro extraíble (la puerta sale junto con la bandeja en sentido recto, o con apertura lateral (ojo con el sentido en el que se abre en tu caso, ya que no son intercambiables).
• Horno con puerta lateral
• Electrolux EOC 55110 X
• Los mandos escamoteables, es decir, que una vez usados basta con apretar las roscas para que se escamoteen en el frontal del horno sin que estorben, se manchen, etc.
• Los controles digitales. Si te gusta la tecnología, hay hornos con todo tipo de funciones digitales desde seleccionar el tipo de asado para que el horno solo te indique el tiempo y la temperatura, hasta la autolimpieza en función de la suciedad que haya en ese momento en tu horno.

La iluminación interior. Hoy en día todos los hornos incorporan esta ayuda que te evitará tener que abrir la puerta constantemente para ver cómo evoluciona tu guiso. Gracias a la luz interior de los hornos puedes ahorrarte mucha pérdida de energía.

Temporizador. Esta función suele estar disponible en la mayoría de los hornos y te permite programar el tiempo que quieres que esté operativo el horno y la temperatura de cocinado, dependiendo de lo que estés cocinando.

El acabado (inoxidable antihuellas): los hornos inoxidables están de moda, y frente a los tradicionales modelos en acabados blanco o negro, suelen venir ya equipados con un esmalte antihuellas, lo que te evitará esas molestas huellas que brillan sobre tu horno al trasluz o según con qué inclinación lo miremos.

Se trata de estética, pero a la vez de mediante técnicas modernas, encontrar materiales que eviten las molestas huellas en el acero inoxidable.